a la cuarta hora en la furgoneta es cuando la cosa se pone interesante. ya ha ocurrido esa primera parada en la que todos caemos a comprar alguna patata-guarrada que nos deja la boca llena de sal y la gente se queda dormida. ese es el momento en el que piloto y copiloto ponemos nuestro cd favorito pero no para cantarlo -no querríamos despertar a nadie- sencillamente para que nos acompañe en ese momento íntimo que sabemos que está a punto de ocurrir. estoy hablando de manera impersonal, pero en el fondo anita sabe que hablo de ella si hablo de mi copiloto favorito. creo que las conversaciones más interesantes que hemos tenido en estos cuatro años (?), la gran mayoría han ocurrido durante esos famosos e inconfundibles momentos-de-charlar-mientras-todos-duermen en el coche.
pero las cosas están cambiando, y en el último viaje ya no era yo la que conducía.
